sábado, 29 de junio de 2013

Dejame que te cuente X.

Caminaba... Lento y fugàz; triste y tranquilo. La noche se habìa apoderado de cada uno de sus miedos y este ultimo era el màs punzante. Desde niño habia tenido un profundo respeto hacìa lo negro y hondo; por eso jamàs aprendio a nadar y la oscuridad fue dueña de sus insonmios que como era de esperarse generaria en el, un aura sombria de que conocia lo màs oscuro de las sombras y para mitigar el sueño se envolvia en escritos de Lovecraft donde seres de profunda mistica atacaban su imaginacion y destruian sus pensamientos.

Esa noche, el cielo parecia haber vomitado estrellas y en lo màs lejano del paisaje se escondia la luna timida y sigilosa detras de una espesa nube que buscaba acaparar la atencion a la mitad de un inmenso paisaje, las siluetas de las aves que cruzaban rapidamente marcaban el rumbo a seguir por nuestros pasos mientras que el aroma a mortecina venia con el viento.

Tal vez, el màs profundo de sus temores era producto de un pacto con el diablo. Que años antes le habìa concedido la habilidad de cambiar la mente de las personas a su antojo y sin màs argumentos que sus propias ambiciones miro a los ojos negros como agujeros del demonio; sintio que caia por un pozo gigantesco que alumbraba hacia el final, unas llamas rojas,  filosas como navajas. Luego de esa noche, y por las que vendrian posterior a su encuentro serìa repetitivo ese sueño que se palpaba tan real que podia sentir a la misma muerte arrancarle el alma y entregarsela de nuevo al salir el dia.

De a  pocos,  aquella habilidad se salia de las manos, y con solo pensar en que alguien deberia callarse era suficiente para que esa persona arrancara  con las uñas su lengua sin aparente dolor alguno y se tumbara al suelo botando sangre a bocanadas y riendo como si fuera algo divino.Con los dias se apartaba màs del mundo y su conciencia retumbaba en cada acto, y su corazòn aùn bondadoso buscaba morir pero su ambicion detenia el mundo, errante querian encontrar consejo de alguien que hubiera vivido lo mismo, hasta que cierto dia, llegando a una aldea gitana el hombre sin voz se acerco limpiandose los dientes con la lengua y observo fijamente la sombra   lugubre que aùn proyectaba; tenia los mismos ojos que el demonio pero con una luz blanca en el fondo, afiladas como cuchillos y de apariencia electrica, de alguna manera era màs temible que el demonio y antes de caer por el pozo saco un par de lentes oscuros y redondos, sus cejas dejaban ver cierto interes por la situaciòn que se presentaba, se paro frente a el, reflejando en sus gafas la imagen demacrada de aquel buen muchacho con alma noble y con cierto movimiento brusco indico que lo siguiera, en aquel sendero polvoriento que dejaba un sabor a cal en la lengua...

Continùa..

viernes, 14 de junio de 2013

Dejame que te cuente IX ( Guerra )

Escribio su ultima carta; finalizandola con la frase: 

¨Los pocos que quedamos tenemos la fuerza de muchos, la idea del pueblo es el desenfundar de nuestras armas y la guerra que ahora perdemos serà en un futuro la razòn para que nuestros hermanos luchen, ahora la muerte me huele la nuca y yo le escupo en la cara¨

Hace poco se escucho el estruendo que ruge en la boca del mismo demonio, y los gritos se hicieron uno solo mientras que el olor a muerto despegaba hacia el aire, yo caminaba solo con mi rifle queriendo encontrar alguien para desahogar mi rabia. De donde vengo, la vida es peor y cuando anunciaron la guerra me prepare sin dudar, siempre eh contemplado morir sin ninguna razòn; solo se necesita estar vivo para morirse decía mi abuelo cuando me enseñaba a amarrarme los cordones de mis zapatos y cada instante que pasa es un segundo menos de vida. Cruze la esquina mugrosa, llena de escombros y tiznes de sangre que chispoteaban cuando las armas acababan fusilando a los ancianos nobles que se negaban a la barbarie, pisando un charco la huella roja se extendió por todo mi camino y cuando por fin pude apuntar contra el soldado grande, imponente de ojos azules y metralleta en ambas manos senti el rugido del cielo caer sobre nosotros dejando nada màs que un destello a lo que vino despues una oscuridad perpetua. En ese instante pude ver a mi abuelo, mi padre cogido de la mano con mi madre y a su lado mis hermanos que esperaban anciosos mi llegada para antes de la comida; era Spaguettis como todos los domingos y aunque fuera sabado nunca caia mal una buena comida en alguna fecha especial olvide mi miedo insensato a la muerte y me senté a mirar la obra infinita del cielo e imaginarme que existiera una raza màs insulsa que la humanidad.

martes, 4 de junio de 2013

Dejame que te cuente VIII ( De aqui en adelante. )

Aqui entonces, partimos los dos; continua el recorrido con pasos finos que la elegancia es parte unica de tu esencia, impregname tu aroma como recuerdo de lo que alguna vez vivimos y si la fuerza te alcanza; abrazame una vez màs tan fuerte que cuando me este alejando no sienta la tristeza de  ser incapaz de tenerte presente solo en mi pensamiento.

Tù mirada aùn baja no puede saber que estoy tan cerca que podrias reconocer mis suspiros, y entonces alzas tu cabeza queriendo reconocer el horizonte y despegandote un poco de las teclas de aquel celular viejo, choco sus ojos con los mios e inmediantamente un esbozo de sonrisa se dibujo en la cara y como si el tiempo no hubiera sido suficiente, lo mirò con amor genuino y reconocio muy adentro que jamas habìa dejado de quererlo, apesar del tiempo. Se dijeron màs con la mirada que cualquier hombre pueda haber expresado en letras y con honestidad, ambos sabìan que el amor y la vida los mantenía por aparte; en caminos por recorrer el destino ya estaba escrito y sus decisiones tomadas.


Asì que me di vuelta, con el corazòn derrotado una vez màs, lleno de cobardia y sentí su abrazo apretandome como si quisiera arrancarme el alma de un solo tajo, ese aroma; un calor suspirandome en el oido con un sollozeo que me derrumbaba lo màs profundo. Despues de unos momentos me solto y pude sentir la vida con su muerte en un solo instante y supe que no habia tristeza màs grande en un hombre que haber muerto y vivir para contarla...

sábado, 1 de junio de 2013

Apesar de todo II

Me pierdo entonces en mis pensamientos, con un cigarro en la mano y el control en la otra; los dias pasan con odio y tristeza atraves de las ventanas sucias que se convirtieron en mis ojos, soy el desespero de alguien y la decepcion de otro. En mi cada uno esta reflejado y aquel hombre de pelos rebeldes dejo su alma en el pasado y vagabundea como si el mundo hubiera perdido su sentido para encontrar tal vez la felicidad en este presente, que ciertamente es el unico futuro que existe.

Pero tambien, existe ese hombre con la genialidad de muchos. La perseverancia del uno y la honradez del otro. El pasado le enseño a hacer lo correcto por encima de lo incorrecto y cada dia es una lucha con su interior; con los recuerdos que nos maltratan màs que cualquier castigo, sonrisas hipocritas a un mundo ficticio en el cual nadie puede decir la realidad en medio de lo absurdo; la mentira se convirtió en nuestra verdad y en el hombre que se guarda dentro se oculta la genialidad de muchos ( o de pocos ) que a ratos busca expresarse, como quien busca ser escuchado hablándole a Dios y las respuestas llegan a su cabeza;    ¿es esta la vida que nos toco vivir? ¿ O es esta la mentira que nos hicieròn creer?.

Asi entonces me pierdo de nuevo, miro la ventana empañada con gotas que bajan rapidamente queriendo llegar antes que las otras y sin saber realmente hacìa donde se dirigen o quien las mira detras del vidrio opaco.. son tantas que me confundo, asì que les puse nombre a todas para diferenciarlas...